Actualmente pienso
que vivimos en una dinámica de permanente estimulo emocional, obtenido de
forma inmediata y pienso que fraudulenta. Tanto a nivel visual, perceptivo y
sensorial, Estamos saturados de información de como se deben hacer o no las
cosas, constantemente salen estudios queriéndonos arreglar la vida y que nos
dicen que comer, vestir, leer etc...
Los avances y el progreso digital de todas
todas nos ha hipnotizado cual serpiente encantada al son de una melodía. Con
ingesta de substancias químicas (legales e ilegales) queriendo sentirnos
constantemente bien con nosotros mismos, la gran mayoría de la población
occidental desde que que se levanta hasta que se acuesta, está constantemente
en busca de ese estimulo. (España es líder en el consumo de pastillas para
dormir)
Por mi parte
pienso que todo tiene su momento, su lugar, su hora y que por mucho madrugar no
amanecerá más temprano. Por mi parte me niego a ser víctima de mis propias
emociones, decido premeditadamente hacerme responsable de mi actitud y voy a
ser consecuente con la realidad en la que vivo. Es por ello que no excusare más
mi comportamiento irresponsable hacia mí mismo, en base a las cosas externas
que me suceden y estoy dispuesto hacer cosas que no me agradan por qué no puedo
ir constantemente luchando contra molinos de viento disfrazándolos en forma de
prejuicios. Cuando me siento decepcionado con algo o con alguien, realmente con
quien lo estoy es conmigo, proyecto mis frustraciones en actos ajenos y me
olvido que al fin y al cabo quien determina mi actitud y quien decide si me
decepciono o no, siempre soy yo.
En
los tiempos que corremos actualmente se ha afianzado un tipo de educación
global, que solo tiene en cuenta los resultados y es así como nos preparan para
la vida. Desde pequeñitos se nos adiestra a competir entre nosotros para
conseguir reconocimiento y se nos exige ser obedientes, productivos y
competitivos.
Te
valoran según los estudios adquiridos y por cuantas cosas materiales hayas
conseguido. Te subrayan con mayúsculas que solo se puede conseguir con esfuerzo
y debes estar dispuesto a pisar a quien sea por tus propios intereses. No nos
enseñan a pensar, innovar, ni a crear. Solo nos enseñan a repetir lo que
ya otros hicieron. No te enseñan a enfatizar. Cooperar, ayudar, fraternizar,
tolerar, dar, compartir, confiar etc. Te enseñan a tener, conseguir, competir,
ignorar, desconfiar, catalogar, repetir, producir, obedecer etc.
Tenemos
una elite de gobernantes que promocionan este tipo de educación para así
perpetuar su estirpe y pasan a ser los mayores exponentes de dichas prácticas.
Es por eso que la mayoría de gobernantes actuales son corruptos, mentirosos, manipuladores,
ego centristas, insolidarios y todo ello acompañado por del mayor de los
cinismos.
Para mí
el único resultado obtenido de esta práctica es la enorme desigualdad en la que
vivimos.
